El desarrollo de la información para un inventario de emisiones puede ser llevado a cabo a través de uno o dos métodos. Un método es mencionado a menudo como el enfoque de arriba hacia abajo, “top-down”. En el caso del enfoque de arriba hacia abajo, factores generales tales como población total, total de unidades habitacionales y total de actividades manufactureras son utilizadas como indicadores de emisión. Los factores de emisión se desarrollan de forma tal que puedan predecir emisiones por unidad de uso de energía o por persona. El producto entre el factor de emisión y un indicador relevante de emisiones entrega una estimación de emisiones. Estas emisiones pueden ser desagregadas por ubicación y tiempo si el indicador de emisiones relevante como por ejemplo, el uso de energía, se conoce para alguna subdivisión de la región de interés y/o para un rango de tiempo. El total de energía regional u otros indicadores globales de emisión pueden ser también utilizados en combinación con información acerca de la población o actividad manufacturera por sector de una región para asignar emisiones a ubicaciones específicas. Es más difícil utilizar este método para asignar emisiones según momento del día. El enfoque de arriba abajo se utiliza mejor para emisiones que tengan un impacto sobre problemas globales o de gran escala a nivel regional; sin embargo puede y ha sido utilizada en problemas de contaminación del aire a nivel local.

Un segundo método se denomina a menudo como el enfoque de abajo hacia arriba. En este enfoque, la región de interés se divide en sectores de interés. La información específica se desarrolla para cada sector basándose en industrias específicas, unidades habitacionales y vehículos que operen dentro del sector. Esta información es utilizada después para estimar las emisiones que ocurrirán en cada sector. Un enfoque de abajo hacia arriba requiere de un esfuerzo considerablemente mayor que en el enfoque de arriba hacia abajo, pero puede entregar datos mucho más confiables y detallados. Sin embargo, no se puede asumir automáticamente que un inventario basado en la metodología de abajo hacia arriba es mejor que uno basado en la metodología de arriba hacia abajo. La calidad de un inventario de emisiones dependerá de la exactitud de los datos de entrada y del cuidado que se pone en su propia construcción

Es común utilizar ambas metodologías para desarrollar un mismo inventario de emisiones. Las emisiones provenientes de fuentes especificas y bien definidas a menudo se estiman utilizando un enfoque de abajo hacia arriba mientras que emisiones provenientes de fuentes más generalizadas tales como unidades habitacionales se estiman utilizando el enfoque desde arriba hacia abajo.

En cualquier caso, es importante determinar con anticipación la distribución espacial y temporal de emisiones que se desea, antes de comenzar con el diseño de la base de datos del inventario de emisiones.